Saltillo, Coahuila.- Durante el inicio de los festejos por 20 años del Centro para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios, el obispo emérito de Saltillo, Raúl Vera López señaló que la defensa de los derechos es un trabajo por la paz, por la justicia y la dignidad humana.
El fundador del organismo, que hoy es referencia nacional e internacional por sus contribuciones en la defensa de los derechos de diversos grupos sociales, puso como ejemplo que gracias a este centro se logró articular el primer grupo que visibilizó el tema de las desapariciones, como lo es Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila.
“Es un trabajo que nos ayuda a desarrollarnos verdaderamente como sociedad dentro de las circunstancias que nos rodean y que nos permiten dar la garantía a todas las familias, especialmente nosotros hemos pensado en los pobres que son a los que más se le niega la justicia”, señaló en la plaza Nueva Tlaxcala a donde acudieron representantes de distintas organizaciones y ciudadanos que han apoyado el trabajo de la organización civil el pasado viernes 6 de julio en el inicio de las actividades conmemorativas.
El asesor jurídico del centro Enrique Martínez Requenes recordó los inicios de la estructuración del centro, que dijo se alimenta de las luchas históricas sociales de la región noreste. El organismo comenzó actividades un 22 de septiembre del 2004, cuando Vera López era obispo de la Diócesis de Saltillo.
En el tema de la desaparición, explicó que en el 2009 comenzaron el “comprometido camino desde y con los familiares” a quienes acompañan en esa búsqueda de la verdad y la justicia que se transformó en esperanza y solidaridad.
“En medio de tanto dolor e impotencia su apuesta de trabajo para apoyar para trascender la condición de víctimas e impulsar procesos de reconstrucción de las personas como sujetas de derechos permean también esta historia de 20 años, que en la actualidad, además de su contribución humanitaria, tiene una dimensión política nacional.
“Seguiremos luchando para que el mantenimiento de un mundo en el que los seres humanos, liberados del temor y la miseria, disfruten de la libertad de palabra y de creencias. La lucha por los derechos humanos implica construir la esperanza en otro México y otro mundo posible; ésta seguirá siendo siempre nuestra apuesta”, añadió.
La directora del centro, Blanca Martínez Bustos, dio a conocer la serie de actividades que se desarrollarán durante lo que resta del año y que implica el abordaje de diversas problemáticas sociales, entre ellas los derechos laborales y el caso de migrantes que han sido desaparecidos o han perdido la vida.
Entre otras actividades destacó la presentación de un libro sobre nuevas maternidades, un documental sobre la historia del Fray Juan de Larios y un foro sobre los retos de los derechos humanos en esta época de transición política.
“Le quisimos llamar celebración, pues pese a la situación tan difícil que vivimos en el país (…) hemos apostado para que el mal y la impunidad no roben la esperanza, la capacidad de seguir sonriendo, festejando, de seguir celebrando la vida y buscándola”, expresó.