Torreón.- En el marco del conversatorio La desaparición forzada en La Laguna: la voz de los colectivos de buscadoras, las representantes de estas agrupaciones coincidieron en la necesidad de una mayor empatía social con la problemática, principalmente de los universitarios que cursan carreras afines a sus necesidades.
“Necesitamos gente que sea empática con esta problemática y es tan triste que digan que andaba metido en algo el que desapareció. Pero, ¿quién les da la autorización de privar de la libertad o de la vida?”, afirmó Silvia Ortiz, representante del Grupo de Víctimas por Nuestros Derechos en Acción (VIDA).
Indicó que hacen un llamado especial a quienes estudian carreras como Derecho y Medicina para que se acerquen y sirvan como un apoyo a las familias que requieren apoyo ante la desaparición de un ser querido.
“Yo le pediría un compromiso a las universidades porque necesitamos de todos los universitarios. Hay carreras afines a todo lo que estamos luchando y necesitamos muchos abogados que se metan a ver todas las jurisprudencias para poder sacar adelante casos judicializados. Hasta médicos que nos asesoren y nos cuiden porque hay muchas familias que necesitan ayudan”.
Puntualizó que el número de profesionistas capacitados para trabajar en los centros de identificación humana es muy reducido ante una problemática enorme.
“Es increíble y es de dar risa la cantidad de antropólogos y arqueólogos. No hay, pero el país está sumergido en una gran problemática no sólo por las fosas clandestinas, sino por las comunes”.
Por su lado, María Elena Salazar, vocera en La Laguna de Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila (FUUNDEC), destacó que el surgimiento de los colectivos ocurrió a consecuencia de unas autoridades indolentes a una problemática y por eso en diciembre de 2009 decidieron salir a hacer pública una problemática.
“En el 2009 no había estos colectivos y no entendíamos la desaparición. Lo primero que hice fue ir a poner una denuncia ante unas autoridades indolentes que me dijeron váyase a su casa y su hijo al rato regresa. Ahí fue cuando las demás familias nos fuimos encontrando en los pasillos de la fiscalía”.
Refirió que a casi 12 años del nacimiento de FUUNDEC no han encontrado a nadie al menos de los casos que dan seguimiento y que las cifras oficiales en cuanto a la problemática están alejadas de la realidad.
“Para nosotros es una cifra nada comparada con la realidad y en el colectivo no hemos encontrado a nadie”.
Además, Lucy López Castruita, representante de la agrupación Voz que clama justicia por los desaparecidos, recordó que en su caso comenzó a buscar a su hija con el apoyo de Silvia Ortiz y después optó por tomar su camino con operativos de búsqueda en vida por diferentes partes del país.
“Fuimos las dos locas que nos atrevimos a los operativos terrestres y las autoridades creían que no lo íbamos hacer. Después empecé con la búsqueda en vida en otros estados en Ceresos y Centros Psiquiátricos”.
López Castruita resaltó que de momento hay un particular interés en el municipio de San Pedro donde detectaron que existen muchos casos de desaparición que en su mayoría no tenían denuncia pese a ser de larga data. De ahí que las actividades conmemorativas al Día Internacional de la Desaparición Forzada del colectivo serán ahí.
“Cuando llegó son 14 familias y cuando pido que se levanten muestras de ADN ya no son esas, sino casi 70 y al finalizar los tres días de la jornada eran 130”.
El conversatorio tuvo lugar durante la tarde del pasado sábado 28 de agosto en la Librería El Astillero y fue transmitido a través de la página de Facebook del Programa de Derechos Humanos de la Ibero Torreón.