Autoridades menos tolerantes a las marchas y mujeres manifestantes cada vez más hartas de la situación de violencia, inseguridad y desigualdad, fue una combinación detonante para que en marcha del 8 de marzo en la región hubiera confrontaciones entre grupos de participantes y las fuerzas de seguridad.
La marcha “¡Grita fuego, hermana!”, conmemorativa del Día Internacional de la Mujer, partió del Parque Victoria de Lerdo, poco antes de las 4 de la tarde rumbo a Gómez Palacio y finalizó en la Plaza Mayor de Torreón.
“¡Hoy alzo la voz para que mañana no falte ninguna en mi salón!”, “¡Somos la voz de las que no están!” “¡Grito por lo que mi mamá llegó a callar!”, “¿Qué mujer en tu vida tendrían que matar para que te preocupa la violencia?”, “¡Marcho hoy por mis amigas, para no marchar mañana sin ellas!”, 0 “¡Nos falta Kari”!, fueron algunos carteles que portaban las participantes.
En otros más exponían a sus agresores así como la impunidad en la que viven a pesar de haberlos acusado de delitos como violación.
Las consignas parten de una triste realidad que viven las mujeres en México. En 2023, 10 mujeres al día fueron asesinadas, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Este año, Coahuila registra siete asesinatos de mujeres, mientras Durango dos, uno de ellos se investiga como feminicidio y ocurrió en Tlahualilo.
En la marcha participaron madres, hijas e hijos de víctimas de feminicidios, colectivas y grupos de mujeres que se organizaron para asistir.
La sororidad se hizo presente a lo largo del recorrido, pues grupos de mujeres se colocaron en puntos estratégicos para llevar hidratación a quienes realizaban el recorrido de más de 8 kilómetros.
En Gómez Palacio, el grupo de “Los Goris” hizo sus rondas a la manifestación, mientras la marcha era fuertemente vigilada en su paso por esa ciudad. El intento de detención de una de las manifestantes por parte de policías desató el reclamo de las participantes.
En Torreón la situación no fue mejor. Desde el pasado miércoles, autoridades del Ayuntamiento colocaron unas vallas en la plazuela Juárez, así como en la explanada de la Plaza Mayor, por un evento del Día de la Mujer, una exhibición de autos.
Esto ocasionó, en primer lugar, que el espacio libre no fuera suficiente para albergar a las miles de mujeres que se dieron cita para recorrer las tres ciudades hermanas, y permanecieran sobre la Ramón Corona y la Morelos.
La concentración que es uno de los eventos catárticos para muchas mujeres por ser uno de los espacios seguros en donde pueden hablar de las agresiones que han sufrido de sus responsables, sobre las violencias que han sufrido, gritar, cantar, bailar y exigir a las autoridades de todos los niveles y a la sociedad un freno a la violencia, terminó con enfrentamientos entre mujeres y policías.
Las policías por su parte se instalaron detrás de las vallas para impedir el paso de las manifestantes que buscaban utilizar el espacio público. Algunas lograron colarse, pero rápidamente fueron detenidas.
El forcejeo continuó por lo menos durante un par de horas, en las cuales un grupo de mujeres insistían en utilizar el espacio adquirido y acondicionado con recursos públicos. Dimes y diretes y botellas de agua “volando”, fue la constante.
“Es abiertamente una provocación que hayan instalado las vallas días antes la marcha, si ya saben que es le punto de concentración, ahora, es contradictorio que lo hagan para “celebrar” a las mujeres, ni siquiera saben que este día no se celebra, pero sólo lo hacen para provocar y desprestigiar el movimiento”, dijo Irene, una de las asistentes.
“Ellos saben que aquí es donde termina la marcha, les importa más cuidar paredes y pisos que a cualquiera de nosotras, lo que no saben es que este movimiento nadie lo va a detener”, añadió Claudia.
Y es que las marchas de mujeres en la Laguna cada vez están más nutridas, producto de las convocatorias y organización, pero también de la situación de violencia que viven y que al pasar de los años, no mejora, mientras las autoridades lo que hacen es reforzar la seguridad durante las marchas.